¿Tienes la absoluta certeza de que eso que estás pensando o sintiendo o defendiendo es verdad? ¿De verdad qué es verdad? ¿Quién lo dice? ¿Qué te hace pensar que es verdad? ¿En qué te basas? Ni la verdad es la realidad, ni la realidad es la verdad, todo cuanto pensamos parte desde una mirada humana comprendida dentro de una vasija heredada de conceptos.
Maku Sirera Pérez
DINÁMICA DE LA ABUNDANCIA
Vas a necesitar;
- Folios del color que tú sientas.
- Bolígrafo con la tinta de color rojo, (simbólicamente representa la sangre de la familia)
- Sobres de color rojo, (seguimos con la simbología de la sangre familiar).
- Lazos o pegatinas para envolver la carta.
- Imagínala y siéntela como un regalo que vas a recibir de tus padres.
En el universo todo es energía y ya sabemos que ésta no se elimina ni se destruye, tan sólo se transforma. Todo está en constante transformación desde un solo principio, la vida en un amplio concepto universal. Cada individuo se encuentra al servicio de la vida, para un bien mayor y colectivo. Nada está separado de la Fuente, de la vida, estando al servicio de la misma. Las sombras y las luces, ambas se sustenta y se sostienen. Desde esta mirada la vida crea y transforma en unidad, como pequeños hilos que unen las formas, orquestando una pieza musical eterna y necesaria.
Hoy quiero hablar de un concepto que parece ser, en la mayoría de las mentes humanas, un concepto tóxico, malo, sucio, etc. Describir lo que todos hemos escuchado en algún momento de nuestras vidas sobre el tema que hoy me ocupa es innecesario, pues sé que irás entendiendo que tan sólo son conceptos. Te recuerdo que éstos, los conceptos o las interpretaciones, son neutros, todo es transmitido desde la mente humana, sus creencias y programas y dependerá de la época, lugar, sociedad y familia sean emitidos, tendrán una repercusión u otra. En el inconsciente no se graban los conceptos, se almacenan las emociones asociadas a estos, las causas de cómo se han experimentado individualmente en “unidad” con el colectivo y las consecuencias que generan los patrones de comportamiento que causan a su vez más de lo mismo.
Hoy te hablaré del dinero y como ya he dicho antes que todo es energía, hablaré de ésta y de su simbología asociada. Te adelanto que la energía del dinero es igual a vida. Si la vida fluye, el dinero fluye. Ya, ya sé que ahora mismo te están brotando un millón de juicios entre «espumarajos» de horror. Tranquila, voy a tratar de explicarte este concepto en la medida que pueda, para poder abrir ante ti un mundo de posibilidades a la abundancia. Te adelanto un par de conceptos que también van asociados al dinero y por tanto a la abundancia, a la vida. El dinero fluye desde el respeto y el equilibrio o se evapora y/o no llega desde el rechazo, la queja, el victimismo, la inmadurez y el juicio. Dar y recibir en igualdad y a la misma altura, primero dar y luego recibir, primero creas y luego recoges.
Volvemos al concepto de energía. Si en el universo todo es energía y ésta se encuentra entre sí por resonancia, podríamos decir que cuando no encontramos algo es que no resonamos con ese algo, si?. Me explico. La energía vibra, emite una frecuencia que resuena en el mismo campo y atrae la energía que resuena entre sí. Seguimos… si todo es energía en vibración y resonancia, nuestros pensamientos también son energía vibrando y resonando entre frecuencias que se atraen entre sí.
Te cuento un ejemplo: Yo tengo en mi mano un teléfono móvil de última generación, imaginemos que tengo el mejor teléfono móvil del mercado, si?, bien. Tú tienes en tu mano un walkie talkie último modelo que podríamos decir el mejor del mercado en tecnología walkie talkie. Los dos dispositivos son magnificos y tienen todo lo necesario y más para comunicarse sin problemas, funcionan perfectamente, sin embargo, entre nosotras, no nos podemos comunicar por que no utilizan la misma frecuencia. Se encuentran en el mismo lugar, en el mismo espacio de tiempo e incluso tan cerca que podrían rozarse, sin embargo no existe forma de comunicarse entre ellos puesto que utilizan frecuencias diferentes y el uno para el otro no existen. Pues bien, este ejemplo nos sirve para cualquier otra energía, digo cualquiera.
Volviendo a la abundancia y en especial al dinero que es lo mismo que vida. Si nuestros pensamientos, (somos pensados), son fabricados desde nuestras creencias y programas familiares, culturales, sociales, etc que no emiten la misma frecuencia que la vida, (dinero), ésta no nos verá, no existiremos para ella por mucho que nos esforcemos, resonaremos con lo contrario, es decir, con la supervivencia, que es lo mismo que la dependencia, que es lo mismo que la carencia, rodeándonos de experiencias que reforzarán una y otra vez ese mismo concepto, es decir, carencia, dependencia y supervivencia. De ahí que nos quejemos de no tener, de no llegar, de no estar, empleando un sinfín de argumentos para mantener esto mismo que creemos real. Sin embargo, tan sólo son conceptos que nos mantiene en lealtad con lo heredado a nivel familiar o social para pertenecer a nuestro entorno y sobre todo, a nuestro sistema familiar limitando un mundo de posibilidades.
La familia puede ser un ancla de repetición o un trampolín de superación. ( Jodorowsky)
Ya sabes que nadie existe aisladamente y que la vida no se da en soledad, en especial los mamíferos, necesitamos de un núcleo familiar que nos sostenga por lo menos los primeros años. He de decir que hay personas que cumplen 70 años en modo niño con ese principio de pertenencia vinculado al de supervivencia activado. Todo esto es inconsciente, lo es mientras no tomemos la decisión de cuestionarnos todo desde el mayor de los respetos, observar qué nos funciona y qué no y en qué medida nos afectan nuestras decisiones. La pregunta podría ser ¿ Lo que estoy viviendo hoy me lleva al lugar donde quiero vivirme mañana? Si la respuesta es sí, no hay más que decir, si la respuesta es no, cambia, vuelve a leerte este artículo desde el principio hasta el final, quizá te ayude algo, o quizá no, ve a terapia, realiza cursos, talleres o lo que sea que te sirva para cambiar tu mirada y con ese cambio tu frecuencia y la vida misma.
Cuando digo que el dinero es igual a vida, estoy totalmente en mis cabales y he llegado a esta conclusión después de reflexionar mucho sobre él, haber hecho muchos cursos para comprender porque lo buscamos y al mismo tiempo lo detestamos y haber asistido a talleres de desprogramación de creencias, de PNL, etc. Fue cuando comencé a estudiar las constelaciones familiares que vinieron a mí las respuestas que estaba buscando. El universo habla todo el tiempo, habla el idioma de la Vida, su alfabeto está compuesto por las letras “sí a la vida” y todas sus combinaciones. Cuando entendí esto, comencé a entender el funcionamiento de todo cuanto nos rodea y cómo miramos nuestros escenarios de vida, interpretando todo el tiempo desde el mismo lugar, siempre claro está, que no detengas la inercia de sobrevivir, aterrices en el aquí y ahora y desde la más absoluta presencia, tomes consciencia de dónde, cómo , cuándo y quién soy en todo momento, entonces cambia tu mirada, cambia tu energía y se obra el milagro. Por cierto, un milagro que siempre ha estado ahí, tan solo tenías que cambiar tu mirada para cambiar tus creencias, cambiar tu energía, cambiar tu frecuencia y “¡Zaska, aparece frente a ti como un milagro!
El dinero es una energía neutra facilitadora de vida, en él se da el equilibrio y la multiplicación, (deja de fruncir el ceño, de escupir juicios y limpia tus labios de espumarajos por favor y abre tu mente por un instante), todo lo más, si lo que te estoy contando no te sirve, cierra el móvil o el ordenador y sigue haciendo lo que hasta ahora hacías, así de simple. Sigo, es energía facilitadora de vida, nos vuelve la vida fácil, cómoda, amable, rica, generosa, nos da la posibilidad de darle valor al conocimiento, a nuestras habilidades y cualidades y compartirlas en el mundo engrandeciéndonos, alimentándonos y sosteniéndonos en cooperación. Con el dinero nos procuramos un hogar donde cobijarnos, protegernos y creamos familia, ( transmitimos y la especie no se extingue). Recibimos las comodidades de tener luz dentro de nuestra casa y con ella electrodomésticos; televisor, lavadora, lavavajillas, frigorífico, calentador, ¡wuaw! ¿Te has parado a pensar toda la infraestructura que se necesita para fabricar una red de electricidad para que tú disfrutes de ella en el interior de tu hogar? Todo esto necesita dinero para construirlo y dinero para sustentarlo y mantenerlo, poniendo al servicio de la vida todo el conocimiento, las habilidades, las cualidades y el valor de quien lo creó, lo inventó, lo fabricó o contribuyó a que esto se diera. Y ya no nombro el tema del agua, abrir el grifo de tu casa sin tener que desplazarte a ningún otro lugar y que salga agua y además caliente, es toda una fortuna, para esto también se precisa dinero. Comprar alimentos para ti y tu familia, cuidando del hogar más necesario y sagrado para la vida, tu cuerpo, también se precisa dinero en movimiento, de unas manos a otras, de un corazón a otro, de una vida a otra, fluyendo y creando vida. Energía en movimiento de igual a igual, valorando a quien ha trabajado para que tú disfrutes y trabajando tú para que otros disfruten, desde el respeto por el trabajo de los demás y del tuyo propio y creando un intercambio equilibrado entre el dar y recibir. Si nuestra energía hacia el dinero, hacia la vida es de juicio, de queja, de envidia, de reproche, de desprecio, etc, el dinero, es decir la vida, pasará de largo y se irá donde sea bienvenida, donde sea respetada como fuente de vida, aceptada e intercambio creando más vida a su paso. Ninguna energía nos pertenece para siempre, forma parte de la misma vida en movimiento.
¿Conoces a alguien que acuda o se quede al lado de alguien durante mucho tiempo desde el desprecio, el juicio, la mentira, el rechazo, la queja, el insulto, etc? Yo tampoco, sólo lo he visto en personas con una baja autoestima que ni siquiera se ven a sí mismas. La autoestima, baja o alta, no define a las personas, sólo define un proceso por el que pasamos y que siempre, y digo siempre, podemos transformar.
Pienso que, llegado hasta aquí querido lector, ya sabes por dónde se mueve la energía y sus posibilidades de abundancia y vida.
¿Qué necesita el dinero de nosotras, las personas, para sentirse valorado, respetado, reconocido y que nos acompañe a cumplir nuestros sueños y a vivir? Y digo vivir y no sobrevivir y ser criticado y rechazado. ¿Qué necesita de nosotras para resonar desde la vida y acompañarnos desde esa frecuencia a crear abundancia ilimitada? Os diré que hay 3 principios.
- Tomar a los padres tal y como son, sin quitar ni poner nada, tal cual han sido y son. Ellos son la fuente de nuestra vida, estamos aquí gracias a ellos y a todos los que se encontraron para crear vida antes de ellos. La vida nos llega desde muy lejos, no nos pertenece, tan solo formamos parte de ella teniendo el derecho de sentirla y vivirla y la obligación de transmitirla mejorada.
- Colocarte en el lugar que te corresponde en cada momento, desde tu responsabilidad, sin atacar a nadie ni buscar cómplices o verdugos. Pretender asumir un rol que no te toca es una falta de respeto hacia la vida. Te pongo un ejemplo: Un hijo que hace de padre de su padre, (está en modo abuelo, no será reconocido como hijo), un marido que hace de padre de su pareja, (está en modo padre, ella se comportará como una adolescente o una niña con él y no como su pareja), etc, sigue siendo una falta de respeto a la vida.
- Agradecer todo cuanto ha sucedido, aunque no lo entendamos, agradecer tal y como fue. Agradecer lo que ya tienes. Agradecer a tus padres que te dieron la vida, sólo esto ya es motivo de agradecimiento para ti, al margen de cómo se comportaron o se comportan, (crece y acoge a tu yo adulto que te sostiene). Agradecer todo sin quitar ni poner nada, amar “tal cual es”, “ tal y como es todo”, “asentir a la vida”. Agradecer a los que se fueron e hicieron sitio para los que estuvieron y están. Agradecer a las ex parejas de nuestras parejas que han dejado espacio para nuestra historia y la vida en sí. Agradecer a las ex parejas de nuestros padres o abuelos o bisabuelos y así hasta el infinito, por dejar espacio y lugar a nuestro sistema familiar y a que la vida se diera para que hoy estemos aquí. Podría seguir hasta 2074 agradeciendo. Agradecer sin deudas, sin culpa, “AGRADECER ASINTIENDO A LA VIDA TAL Y COMO FUE, TAL Y COMO ES”.
Lo que vivimos está al servicio de la vida y de la humanidad. Honrar la vida de nuestros ancestros y todo lo que sucedió tal y como sucedió, sin juicios ni condenas. Honrar sus vidas y soltar la condena, el juicio y la culpa nos convierte en parte de la vida y en su fluir, permitiendo siga emanando abundancia a través de nosotras. Se honra la vida que nos llega de atrás, de muy lejos siendo felices y abundantes con nuestra vida, agradeciendo la vida transmitida y todo lo sucedido, de esta forma todo lo que vivieron nuestros antepasados no fue en vano, sirvió para bien. “SOLTAR EL JUICIO Y LA CULPA PARA TOMAR LA VIDA Y TRANSMITIRLA”.
Ahora, después de esta breve explicación, (y digo breve porque esta temática ha dado y da para muchas, muchísimas páginas), te facilito una dinámica que te puede ayudar a abrir tu corazón y tomar consciencia de tu valor, abriéndote a un mundo de posibilidades hacia la abundancia, es decir, hacia la vida. Soltar parte de lo que llevas a tus espaldas y liberarte de lo que no te toca portar caminando un poquito más dispuesta y agradecida.
Colócate en un espacio en soledad, donde no seas interrumpida y sea un espacio seguro para sentir y dejarte en paz. Coloca 2 sillas, una donde te vas a sentar tú y otra frente a ti donde estarán sentados tus padres, simbólicamente claro está. La silla que está frente a ti, representa a tus dos progenitores, los dos en unidad. Puedes poner sus fotos si esto te ayuda, sus nombres o simplemente un papel con la palabra “progenitores”, como tú lo sientas será perfecto.
Toma un folio y escribe un proyecto, un sueño o un propósito que quieres conseguir en este nuevo año 2024. Tómate el tiempo que precises para esto, recuerda que eres importante, eres fuente de vida. ¿Quién te has creído que eres para negar que la vida pase a través de ti? Una vez escrito, reflexiona qué necesitas, qué puedes aportar y qué te falta para que tu proyecto se materialice, se haga realidad, sea fuente de vida. Una vez que tengas escrito esto también, (te recuerdo que la escritura baja a tierra, (mamá=vida), y materializa), medita sobre eso que has escrito que te falta y siente qué recursos puedes tomar de tus padres, de ambos en unidad, que te lleven a conseguirlo. Te aseguro que si te rindes a este pequeño ejercicio, abandonas el juicio y te echas a un lado dejando paso al agradecimiento, encontrarás los recursos y las herramientas necesarias en tus progenitores para que tu proyecto, sueño y creación se materialice.
Escribe, borra, emborrona, rompe y vuelve a escribir si te hace falta, date permiso para la vida, ésta te viene dada a través de ellos, no lo olvides. Todo forma parte del mismo proceso. Cuando ya lo tengas lo sabrás, el SER siempre sabe. Si abandonas hoy, retómalo de nuevo mañana hasta que la vida fluya a través de ti y esos maravillosos recursos o herramientas lleguen a tus manos como grande regalos. Te recuerdo ¿Quién te has creído que eres para negar que la vida pase a través de ti?
Una vez lo tengas, escríbelos en un folio de forma clara y desde el corazón. Imagina que el bolígrafo está sustentando por los dedos, que a su vez están sustentados por la mano, que a su vez está sustentada por el brazo, que a su vez está sustentado por el hombro, la espalda y por el pecho donde se encuentra tu corazón, todo se encuentra conectado.
Una vez tienes el propósito o proyecto o sueños escrito y qué puedes tomar de tus padres que te va a ayudar a hacerlo realidad, a materializarlo. “AHORA”. Respira y entrega ese folio que has escrito a la silla que tienes frente a ti, toma otra respiración y cuando sientas, colócate en la otra silla y déjate en silencio durante unos minutos para el campo de tus progenitores te tome y sientas su energía en ti. No tienes que hacer nada más que dejarte sentir en su lugar, nada más, deja los juicios y ríndete a este instante de paz y acoge tu sentir en ellos. Una vez transcurran unos minutos, toma lo que está escrito en los folios que tienes entre tus manos y desde el corazón de tus padres, desde su lugar escribe una carta de poder. Es una carta escrita por tus padres, en ella te cuentan tu proyecto o tu sueño hecho realidad, reconociendo tus valores, tus habilidades y cualidades y todos esos recursos y herramientas que ellos te regalan y que ya están en ti. Escribe, siente y escribe, sin límites, el amor no los tiene. La vida es ilimitada.
Cuando sientas que ya has terminado de escribir, siempre desde el corazón de tus padres, en este instante eres ellos, toma otra respiración profunda y añade estas palabras al final de la carta, sigues en el corazón de tus padres y sentada en su silla.
Te amamos hija/o, siempre te amamos y seguiremos amándote por los siglos, cumplimos nuestro acuerdo sagrado y estamos aquí para ti, por siempre. Te vemos y vemos tu inmenso valor. No hace falta que nos pidas, solo acude a nosotros y toma lo que por derecho te corresponde, es tuyo mucho antes de tomarlo. Nosotros estamos dispuestos y disponibles como seres que te han dado la vida, por siempre.
Vemos tu grandeza y lo que habita en tu corazón. Recuérdanos como fuente de vida que puedes tomar siempre.
Te vemos, te reconocemos y te amamos, tal cual eres te amamos.
Mamá y papá te abrazan
Una vez añadido esto último, introduce esta carta en un sobre de color rojo, ciérralo y envuélvelo en un lazo, este regalo te lo mereces, adórnalo como sientas. Todavía sentada en la silla de tus padres, escribe en el sobre tu nombre y apellidos y detrás del sobre escribe las palabras “mamá y papá “.
Desde ese lugar piensa donde quieres depositarlo para que tú lo recojas el día 6 de enero. Puedes enviarla por correo o ir al buzón de tu casa y dejarla allí hasta ese día, Mantén la energía de tus progenitores hasta que entregues la carta. Una vez hecho, la vida se encargará de todo lo demás. ¡Confía!
Te recuerdo que todo es energía en movimiento, en resonancia, la vida se da en el dar y recibir. ¡Muévete con ella!
Maku Sirera Pérez
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